La agonía de la civilización del poder, desde Bolivia,
Por: Álvaro Jordán
El proceso eleccionario, que desarrolla Bolivia para
la renovación del poder ejecutivo y legislativo del Gobierno, culmina el 10 de
octubre del presente año con la elección de nuevas autoridades. Es uno más de
los cientos que se realizan cada año en el sistema mundial de Estados aglutinados
en el marco de las Naciones Unidas, cuyo objetivo central es preservar el poder
para asegurar la explotación de las grandes mayorías y las riquezas naturales
en beneficio de minorías enriquecidas, también identificadas como Oligarquías, plutocracias,
capitalistas, burocracias, empresarios, empleadores y, en general, como explotadores.
La región de Bolivia, conocida en la actualidad en el
arranque democratizador del 2009 como Estado Plurinacional de Bolivia, es otro
Estado en que el poder garantiza la supremacía de las minorías explotadoras
sobre las mayorías explotadas. Si bien se han reconocido las identidades
indígenas nativas se conserva el centralismo racista mestizo y paceño y se ha
incorporado un centralismo racista aimara, constituyendo, en lo interno un
Estado colonial como la mayoría de Estados de América y el mundo y, en lo
externo, un Estado dependiente de alguno de los sistemas de poder dominante.
La humanidad está anonadada ante el futuro
catastrófico que se avizora, ya que los abusos del poder, las ambiciones enloquecidas
por la riqueza y la animalización del ser humano van colocando a la sociedad al
borde de su desaparición y las Naciones Unidas declara la necesidad de una
disminución drástica de la población.
La derrota en Vietnam del imperialismo del capital
privado liderado por los Estados Unidos de Norteamérica y el colapso del
imperialismo del capital estatal liderado por la Unión de Repúblicas Socialistas
Soviéticas puso fin a la guerra fría imperial a nivel cupular y a la confrontación
entre derechas e izquierdas en los niveles inferiores, marcando la agudización
de la crisis terminal de la economía del poder.
La corrupción es la característica generalizada del
sistema de poder en crisis. Los partidos transformados en mafias legitimadas
por la legalidad que les otorga el poder así cono las instituciones del Estado
y empresas productivas han transformado a sus dirigencias, directores y
propietarios en las modernas jefaturas de los carteles delincuenciales, del
narcotráfico, del contrabando, de exacciones abusivas del pueblo al margen de
cualquier legalidad. en definitiva, mafias beneficiarias de la explotación del
pueblo.
La economía asentada en la explotación de las grandes
mayorías poblacionales de todos los continentes del planeta en manos de
minorías privilegiadas ha fracasado en toda su extensión, las expresiones del
capital privado han fracasado, las expresiones del capital estatal también han
fracasado, conjuntamente con todo tipo de capital mixto. Estas sanguijuelas
ahora reunidas en los grupos del Club Bilderberg. del club de los Illumínati,
sociedades secretas y los grandes multimillonarios del mundo dueños de las
transnacionales privadas y estatales se están desesperando ante el negro futuro
que los espanta y se han lanzado a la renovación del viejo proyecto de los
viajes inter espaciales. Es el último intento por encontrar una salida
milagrosa con el uso abusivo de los dineros que les provee la explotación de
los pueblos sometidos en la larga esclavitud impuesta por la civilización.
En Bolivia como en el mundo entero el pueblo ha
empezado a tomar conciencia del carácter mafioso de los partidos y la actitud delincuencial
de las dirigencias, sin embargo, la población no logra configurar una salida al
margen del torrente convulsivo de la crisis del poder. Sigue siendo arrastrada
por el pimponeo de fracasos entre sectores tradicionalmente conocidos como de
izquierda y de derecha, o de revolucionarios y conservadores, fenómeno
repetitivo de los cambios políticos en el mundo entero ante la imposibilidad de
propuestas nuevas dentro del sistema de poder. Así el reclamo del pueblo, expresado
en el Referendo del 21 de febrero de 2016 ha sido supeditado a la voluntad
caprichosa de un tribunal constitucional de seis individuos parcializados
políticamente que deja a un lado los aspectos existenciales de la población,
expresadas en el mencionado referendo e incorporados en la Constitución
Política del Estado por favorecer los intereses sectarios del sistema de partidos
delincuenciales, de gobierno y de oposición.
La única alternativa, humanista, se encuentra en la
propuesta que se ha bosquejado en el libro:” De La Civilización al Humanismo
Superior” el que recomendamos leer para poder entender porque las Naciones
Unidas proclama un genocidio mundial y el pueblo del mundo, inmerso en el
complejo de Casandra camina al ineluctable destino que le depara el embrutecimiento
impuesto por la cultura del poder.
Seguro que este libro te va a interesar. . .