viernes, 10 de abril de 2009

Federación Humanista



-->
--> DE KANDIRE AL HUMANISMO SUPERIOR
(Nativos y Civilizaciones Cambas)
EN HOMENAJE A NUESTROS HÉROES NATIVOS
Por Álvaro Jordán
El Problema
A partir de las luchas independentistas se produjo el encumbramiento del ejército de Sucre, estableciéndose una alianza del liberalismo sustentado por éste y el agonizante monarquismo, convertido a último momento en independentista. Sobre esta base se estableció una hegemonía altiplánica, responsable de la humillante retirada de Sucre y base del colonialismo interno que subsiste hasta nuestros días.
Hasta hace pocos años este neocolonialismo se conformó con beneficiarse de los excedentes de las regiones sometidas, sin embargo como resultado del informe del Banco Mundial de 1993, en el que se sostiene que el altiplano es económicamente inviable, la dirigencia altiplánica ha tomado la decisión de apoderarse del patrimonio y riquezas de los departamentos de la Media Luna, amenazando la integridad nacional y obligando a la población de esta región a plantearse una lucha por su existencia[1].
Los resultados de la aguda lucha política y social entre la democracia, representada coyunturalmente por el movimiento autonomistas, y por el neocolonialismo andino, representado coyunturalmente por el forzado culto a la personalidad, construido alrededor de la figura de Evo Morales, ha dejado una sensación a poco en las aspiraciones expresadas por los manifestaciones masivas de la democracia.
En otras palabras la salida que se le dio al problema no fue la esperada, porque el poder neocolonial no respetó la voluntad del soberano, expresada en el voto directo del pueblo.
En la lucha contra el poder centralista, la estrategia autonomista apareció débil por el uso retaceado de las fuerzas democráticas. En otros términos significa que la coyuntura no fue debidamente interpretada porque se repiten los mismos errores que ya se han dado a lo largo de la historia de la lucha por nuestros intereses. Me refiero a los sectores marginados política, económica y socialmente y que son los que más decididamente se han comprometido históricamente en la defensa de nuestros intereses, puesto que son ellos los que más sufren con el neocolonialismo.
Nadie pone en duda que la historia oficial de América es una visión colonial europeizante, y dentro de ella, la de Bolivia es la de los herederos de esa visión en manos de la dirigencia andino centrista, oligárquica y republicana, ya sea hacendaria-encomendera, clerical, militar, minera, financiera o finalmente estatal en servicio propio y de nuevos centros de poder internacional.
Sobre esto hay que agregar que la dirigencia cruceña, en su línea hegemónica, ha estado tradicionalmente al servicio del colonialismo andino-centrista; recordemos que Warnes debió apoyarse en los pardos y morenos para consolidar la lucha por la Patria en Santa Cruz, Al Colorau Mercau, luchador por la independencia durante 15 años, los señores de Santa Cruz no le permitieron permanecer en la gobernación entregada por Aguilera y debió retirarse temporalmente a Cordillera.
Prefirieron la arrogancia del ejército andino enviado por Daza y después por Arce para combatir a nuestras fuerzas federalistas, representadas por Andrés Ibáñez y Los Domingos, quienes enfrentaron heroicamente al poder neocolonial y cuyos resultados negativos se debieron entre otros a una insuficiente participación de las mayorías tanto urbanas como campesinas, pero sobretodo debido a la traición de la elite cruceña.
Proceso de obsecuencia servil cuya culminación lo realiza el municipio de 1920 con el bochornoso reemplazo del Himno Departamental, un canto a la libertad, de autoría del Dr. Tristán Roca y César Manzoni[2], ganador del concurso propiciado por el Municipio el 23 de setiembre de 1920, por la composición españolista, ilegalmente vigente hasta ahora, del Dr. Leonor Ribera y Gastón Guilleaux.
En la actualidad, a pesar de que la dirigencia actual se ha esforzado en la lucha por la democracia autonomista, una vez más se está repitiendo el mismo error, la falta de incorporación activa de los sectores mayoritarios del campo y la ciudad.
Por lo tanto vamos a intentar ordenar desde el principio la reflexión sobre los antecedentes históricos de los procesos que conforman las luchas por la defensa de los intereses económicos, sociales, políticos, culturales y territoriales que hacen al movimiento democrático frente al despreciable abuso del poder y a partir de allí, la experiencia de Kandire y la Cultura Chane, será el punto de partida para conocer el problema en sus aspectos históricos ya que es base imprescindible para la búsqueda de soluciones y recién poder proyectar un futuro humanista para todos.
Antecedentes
El ensayo que ahora adelanto es un resumen, es el resultado de una investigación bibliográfica y que se origina en un libro que publiqué anteriormente, en el año 2005, con el titulo de “Kandire, origen y evolución del llano boliviano”[3].
En él rescato la cultura de nuestros pueblos nativos[4] de la cuenca amazónica-platense, identificada por los guaranís como Kandire, cuyo valor es su profundo contenido humanista y, por las condiciones de su desarrollo, nos indica un camino posible para la humanidad toda.
Esta cultura, por no haber sido reconocida en toda su magnificencia hasta ese momento, me tomé la libertad de distinguirla con el nombre de Cultura Chané en honor a nuestros ancestros directos, los pobladores originarios de esta llanura, debido a que ellos la defendieron y preservaron ante los intentos de sometimiento de los ejércitos del imperio incaico y del vasallaje guaraní y prefirieron el sacrificio étnico, impuesto por el invasor español, antes que perder su libertad.
Esta lucha libertaria es el invalorable legado de Grigotá, único Libertador que han tenido los pueblos de Bolivia, dejado a nuestras generaciones, ya que Grigotá al vencer al ejército incaico no sólo preservó la libertad de los llaneros, sino que liberó a los pueblos del altiplano, que estaban sometidos a la servidumbre Inca.
De igual forma, parte de este legado es la base principista que sustentó la federación de pueblos libres y respetuosos unos de los otros, dirigida por El Gran Grigotá como única solución posible a la unidad conformada por intereses diversos.
A modo de provocación para los jóvenes estudiantes, inquietos por la investigación, deseo decirles, que el campo de la historia nuestra es un campo poco explorado para la reflexión, la interpretación y la creación del investigador; a causa de que la historia oficial, que hasta ahora se nos ha enseñado en la escuela, el colegio, la universidad, la familia, la iglesia y otros, es la historia españolista y colonial y la historia neocolonial, andino centrista, asumida por la república e impuesta hasta nuestros días.
Nos falta conocer el riquísimo aporte del pueblo nativo para poder conformar una historia que exprese nuestro mestizaje cultural y racial. Claro, es justo reconocer, que han habido diagnósticos, ahí está el libro “Nación y Estado en Bolivia”[5] del Dr. Isaac Sandoval, escrito ya hace más de 15 años, en el que desarrolla lo que él llama la contradicción del estado con las regiones, las clases sociales y las etnias. También están los libros de algunos representantes de la iglesia, los que intentan reinterpretar la historia reivindicando a los “indígenas” y, al mismo tiempo, tratan de proteger la imagen de la iglesia, por lo que no dejan de ser sesgados, por la imposibilidad de hacerlo disimulando la complicidad de ésta con la colonia en la expoliación de nuestros pueblos y su permanente sustento de la arbitrariedad e impunidad del poder.
En este resumen, en el corto periodo de tiempo que disponemos en esta conferencia, voy a referirme en forma particular a los hechos protagonizados por el pueblo chané y guaraní entendiendo que éstos son los más conocidos y sacrificando la amplitud por la profundidad, pero nos permite introducirnos en el enlazamiento con las historias de las otras naciones que integran la región y el País.
Es imposible abarcar el conjunto de naciones, por que cada nación tiene una especial y amplia historia. Tendríamos que hablar de los chiriguanos, chiquitanos, guarayos, ayoreos y mojeños, etnias hermanas con las que los mestizos comparten el territorio, de los yuracarés y sirionós, antiguos ocupantes del noreste del departamento y ahora desplazados hacia Beni, aparte de otros como los chané, los Jarayes, los warasuw`e, yuquis, y otros ya desaparecidos, pero cuya herencia cultural y genética está presente en el mestizaje cruceño, motivo por el que tenemos el irrenunciable deber de recordarlos con nuestro mayor cariño y respeto, y finalmente se debería explicar la diversidad de nombres con los que aparecen a lo largo de la historia.
Por ahora, sólo es posible resumir el aporte de los nativos de la nación chiriguana en la historia regional, Estos, por la comunidad de la lengua guaraní comprenden desde los sirionó al norte de Santa Cruz, los guarayos, en la provincia actual del mismo nombre, los chané, entre el rio Guapay y los límites con la encomienda de Peransures y hacia el sur hasta las provincias del norte argentino, posteriormente mestizados por los guaraníes y conocidos como chiriguanos, isoceños, ava, entre otros.
El oriente de Santa Cruz también fue originalmente ocupado por los chané y, posteriormente, esta zona ha sido invadida por distintos pueblos dando lugar al conglomerado lingüístico conocido en la actualidad como chiquitos.
Al final resumiremos el valioso aporte de la Cultura Chané al pensamiento humanista, que será de interés no sólo para el movimiento democrático autonomista, sino también del mundo entero, como punto referencial, orientador del largo proceso, ya iniciado, de la transformación de la civilización en el humanismo superior.
Kandire
--> -->
MIGRACIONES
Basado en Ibarra Grasso
Quiero empezar reconociendo que el continente americano es una mezcla de todas las razas que poblaron el mundo asiático, africano, europeo y oceánico. Se puede afirmar que existe un sustrato generalizado mongólico debido a que éstas fueron las primeras migraciones que ocuparon el continente. Sobre ésta vinieron y se mezclaron otras razas del mundo, imponiéndose las lenguas de las culturas más avanzadas, por lo que sí se puede hablar de familias lingüísticas que cubren el continente.
La familia arawak fue una de las últimas migraciones, la que llegó a ocupar el territorio más extenso del continente, esto es la cuenca amazónica desde la cordillera hasta el Tocantins y desde el norte argentino hasta las costas de Venezuela y Colombia, extendiéndose por las Antillas e incluso el sur de Norteamérica.
Miembro de esta familia fueron los Chané, los que ocuparon desde Santa Cruz hasta el norte argentino, los mojos de Beni y Santa Cruz y otros grupos menores.
Por otro lado los Guaranís ocuparon la costa atlántica, desde el rio Paranáguazú hasta Pernambuco, de donde migraron algunos en busca de Kandire.
Una aclaración necesaria es el origen de la palabra Kandire. Es una palabra sagrada perteneciente a la cosmovisión guaraní, clandestina por mucho tiempo debido a la sañuda persecución realizada por la inteligencia jesuítica.
Se conoce su significado gracias a la dedicación de Luís Cadogan[6], quien nos informa que es un rito del hombre de los primeros tiempos, en los que éste poseía cualidades extraordinarias, entre ellas, cuando se trataba de una persona ejemplar para la sociedad, tenía la capacidad de transitar de esta vida a un estado de espiritualidad sin pasar por la muerte. De esta manera mediante ritos sagrados, cánticos, bailes y músicas sagradas iba ganando espiriualidad hasta alcanzar en forma de espíritu un espacio en el que encontraba todo lo que en este mundo había ansiado, esto es su felicidad. Este proceso era conocido como Kandire.
Otra aclaración necesaria es el uso de la palabra nativo en lugar de indígena. Las ONGs han construido el concepto de indígena y conseguido su aceptación de parte de los pueblos nativos, aprovechando la corrupción de sus dirigentes, y a pesar del contenido peyorativo que siempre ha tenido. Por otro lado es un calificativo de contenido racista de las épocas del fascismo. En todo caso usamos este nominativo para los pueblos de nuestros ancestros americanos y su herencia identificada con las luchas en defensa de los intereses locales y regionales, además la utilizamos en general para todo habitante comprometido con esta lucha, independientemente de su origen.
Debemos comenzar indicando que el pecado original de la invasión a América se encuentra en la unión de hecho de la Iglesia con los reyes católicos de España y Portugal.
Por su esencia vertical y excluyente el Papa Alejandro VI[7], 1492-1503, padre de destacados personajes de la nobleza europea como el Cardenal Cesar Borgia, el Capitán General de los Ejércitos Pontificios Juan Borgia y Doña Lucrecia Borgia, la Duquesa de Módena y Ferrara, mediante las Bulas Alejandrinas[8], de 1493, “concede el dominio a Castilla y Portugal sobre tierras descubiertas y por descubrir en las islas y tierra firme del Mar Océano, por ser tierras de infieles[9] en las que el Papa, como vicario de Cristo en la Tierra, tiene potestad para hacerlo”.
No se puede dejar pasar inadvertido el contenido irrespetuosamente degradante que usa el representante del catolicismo cuando se refiere a los habitantes de América como “infieles”.
Me pueden objetar que la invasión a América se hubiera producido igual sin la participación del Papa. Son las condiciones objetivas, el nivel de desarrollo de las relaciones de producción las que determinan el curso de la historia, me dirán, y yo les doy la razón, sólo menciono este hecho para ir marcando los sectores todavía activos en nuestra realidad y que debemos considerar sus responsabilidades y motivaciones primarias siempre vigentes.
La iglesia ha sido el sustento ideológico del colonialismo, ha constituido en forma de “inocentes misiones” las avanzadillas de penetración espiritual para dejar posteriormente el espacio a la invasión civil, a la expropiación de sus tierras y riquezas y finalmente, con la penetración militar, a su servidumbre.
Con el neocolonialismo republicano ha cumplido similar función, como instrumento de manipulación espiritual al servicio del poder de turno, con la variante que últimamente ante la presencia de un gobierno ateo-indigenista en Bolivia, se ha acercado una parte de ella a la corriente democrática.
Bienvenida la iglesia, la democracia que buscamos es incluyente, respetuosa del otro y las diferencias, pero no se debe olvidar que su esencia es verticalista y, al igual que los partidos, en cualquier momento se reordenan en función de ese espíritu. Así ha sucedido en estos dos últimos años con los partidos, organizaciones esencialmente centralistas, por lo que cuando les convino se apartaron del movimiento democrático y autonomista para reforzar las posiciones del poder central, ubicándose al servicio del neocolonialismo andino.
Luego del descubrimiento de Cristóbal Colón se produjeron dos Corrientes de exploración y penetración al centro del continente. Una por el norte y el Pacífico y la otra por el Atlántico sur.
Por la costa atlántica del sur se inició primeramente una etapa de reconocimiento de América con Américo Vespucio, entre 1497 y 1499, quién dio nombre al continente. Juan Díaz de Solís partió el 1515, reconociendo el Mar Dulce, esto es la desembocadura del rio Paraguanáguazú, que Vespucio había llamado rio Jordán, él lo llamó como río Solís y posteriormente después de la incursión de Gaboto tomó el nombre de Rio de la Plata.
Alejo García fue náufrago de una nave de Solís, que se hundió frente a Santa Catalina, quien acompañado con otros cuatro compañeros de naufragio, hizo la primera entrada de españoles hacia el centro del continente, aliado con 4.000 o 5.000 guaranís, entre el 1521 y 1526. De esta manera se dio inicio a una alianza entre los conquistadores españoles de la corriente del sur y los guaranís.
Los primeros en busca de las riquezas contenidas en una serie de leyendas sobre la existencia de fabulosos tesoros, como ser la de El Dorado, Gran Paitití, Gran Mojos, Rey Blanco, Kandire[10], Las Amazonas, etc., sagas descritas por los nativos y exageradas por la corona española para provocar la formación de nuevas huestes invasoras.
Los segundos, ansiosos de encontrar su Tierra sin Mal, prometida por sus profetas como Kandire, tierra de la abundancia de alimentos, tierra de gente buena, tierra del amor, tierra de la felicidad. Esta tierra quedaba en los espacios poblados por los chané, gente trabajadora, dedicada a la agricultura, amantes de la paz y generosa, cualidades similares a las de su ansiado Kandire.
El largo camino estaba lleno de peligros por la hostilidad de los pueblos adyacentes, por lo que la alianza con los españoles garantizaba el éxito de la migración. Llegaron a los chané de la cordillera y contrafuertes andinos, replegaron a los andinos más allá de Tomina, Salinas y Tarabuco, de donde volvieron cargados de plata, oro y adornos. En el camino de regreso García fue ejecutado por los guaranís, al no entenderse en la distribución del botín
La mayoría se quedó defendiendo la frontera frente a un nuevo ejército enviado por Waina Kapak, el General Yasca. Allí, se establecieron con los chané e integraron la nueva estirpe conocida como chiriguanos[11], resultado del mestizaje del migrante guaraní con la mujer chané.
Las migraciones masivas guaranís hacia la cordillera chané se iniciaron mucho tiempo atrás, Enrique de Gandía[12] indica que la primera migración se habría producido en la época del Inca Túpac Yupanqui, alrededor del año 1471, confirmada por Garcilaso de la Vega.
Gandía sostiene que el motivo de las migraciones no era solamente las noticias que tenían de la población del Chaco, sino también los metales, y ornamentos de todo tipo de los montañeses. El objetivo era quedarse con la población del Chaco, evidentemente no en el altiplano, donde se encontraba una población aguerrida, odiada por ellos y no podía compararse con su soñado Kandire de gente buena. Su Tierra sin Mal estaba en la cordillera, en la tierra con abundancia de alimentos de los chané.
La segunda gran migración guaraní se habría producido con motivo de las pretensiones de consolidación y expansión del imperio incaico. Según la Relación Cierta[13] de Diego Felipe de Alcaya, hijo del encomendero fundador de Santa Cruz de la Sierra, Capitán Martín Sánchez. Waina Kapak habría enviado dos ejércitos: uno al mando de su protegido Wankané, el que se estableció en Samaipata, y el otro al mando de Condorillo, el que se estableció en las minas de Saipurú, para mantener sumisos a los reinos kollas que se encontraban en creciente estado de sublevación y al mismo tiempo ampliar el imperio hacia el oriente, hacia el extenso territorio de Grigotá[14] de los chané, una confederación integrada con Chiquitos, Jarayes, Mojos y Chiriguanía.
El Grigotá era jefe de un pueblo sin ejército, éste convencido de su indefensión aceptó la alianza ofrecida por Wankané, alianza que con un estado imperial no podía tener otra relación que la de dependencia por lo que se vio obligado a entregar 40.000 chané para los trabajos en Samaipata y Saipurú.
En el recorrido que hicieron ambos por los pueblos para mostrar la nueva relación, se entiende que Grigotá[15], quien iba acompañado por sus jefes inmediatos Vitapué, Tundi y Goli Goli, debió pedir apoyo a los guaranís del Itatín, zona vecina a la Jarayés, en base a la solidaridad establecida por los lazos de parentesco, cultura, lengua y raza que existía con los chiriguanos, ya establecidos en la sagrada Tierra sin Mal.
De esta manera llegaron 5.000 guerreros a la región de la Santa Cruz actual, lugar donde junto con los chané y chiquitanos, se preparó un ejército de 20.000 guerreros y con ellos vencieron a los ejércitos de Wankané y Condorillo.
Ante semejante desastre que amenazaba la estabilidad del imperio, Waina Kapak envió un tercer ejército, éste al mando del Capitán Lucana, de la estirpe Inca, conocido también como Turumayo. También fue vencido por el ejército chané-guaraní.
Por otra parte en la relación chané-guaraní, por la calidad guerrera de estos, aspiraban a someter a los chané a su servicio, por lo que Grigotá apoyándose en la mayoría chané-chiquitana del ejército vencedor desplazó a los guaranís y también los expulsó de sus territorios.
Los resultados de este extraordinario proceso, según Gandía desencadenado entre el 1513 y 1518, de luchas entre los intereses imperiales de Tawantinsuyu y la defensa que asume Grigotá en su primera fase con el apoyo de los guaranís y cuyo resultado es la expulsión de los ejércitos invasores, no sólo de la federación llanera de Chané, Chiquitos, Chiriguanía, Mojos y Jarayés, sino también de los reinos del Kollasuyo, Por otro la expulsión del ejército guaraní determina un acto de liberación de todos los pueblos constituyentes de esta vasta región.
Por lo que podemos concluir que Grigotá alcanzó la categoría de Libertador de los pueblos del espacio que actualmente comprende Bolivia, esto es el único Libertador que ha existido en nuestra historia. Es por este hecho extraordinario que al Libertador se lo distinguió con el título de “Gran Grigotá”.
Sin embargo, lo más importante de esta experiencia es que esta fue la primera vez en que, a partir de Kandire, se constituyeron en este territorio las bases para la formación de una confederación de comunidades libres y si se considera el contenido humanista de la federación llanera, de cultura chané[16], se está frente a una experiencia valiosísima a rescatarse para la elaboración de alternativas más avanzadas en el campo humanista de la sociedad y que es actualmente parte de la discusión en Santa Cruz, Bolivia y el mundo entero.
Como resultado de la expulsión, el Gran Grigotá, en demostración al Inca de haber sido el vencedor y como oferta para reiniciar nuevas relaciones de amistad, ahora en condiciones de igualdad, le envió 200 guaraníes de presente, implicando con ello que la alianza con los guaranís se había roto.
La expulsión de los guaraníes de la federación llanera recompuso las relaciones en formas que el orgulloso pueblo guaraní consideró una afrenta.
Los guaranís organizaron un nuevo ejército e invadieron los territorios de El Gran Grigotá, vencieron al Libertador y reinstalaron la alianza guaraní-chané, momento que dio nacimiento a Cuergorigotá[17], nueva nominación dada por los guaranís a las tierras que fueron de Grigotá. Fue la tercera migración hacia Kandire, realizada entre los años del 1518 y 1521
La cuarta migración masiva de guaraníes en busca de Kandire fue la que realizaron aliados con Alejo García y ya se describió mas arriba.
Con la intensificación de las actividades invasoras españolas también se intensificaron las migraciones guaraníes. Así acompañaron a Domingo de Irala, en 1546, 3.500 guaranís. Posteriormente en el 1550, Domingo de Irala organizó otra expedición, la que por falta de resultados concretos se llamó “la mala entrada”[18], en ella se incorporaron 4.000 nativos.Alvar Nuñez Cabeza de Vaca llegó hasta Chiquitos con 1500 nativos. Ñuflo de Chaves, en su viaje a los Jarayés, en 1557, fue acompañado aproximadamente[19] por 1500 guaranís. En su segundo viaje del 1564 llevó 2.000 guaraníes de Asunción y 3000 de Itatin, los que se quedaron a 30 leguas, antes de llegar a Santa Cruz de la Sierra del Riquió, con lo que terminan las migraciones masivas de guaranís en busca de la Tierra sin Mal, el sagrado Kandire de la cosmovisión guaraní, registradas por la historia.
Las informaciones que se tienen de las investigaciones arqueológicas realizadas en el Lugar de Encuentro de Samaipata indican la existencia de tres periodos de asentamientos poblacionales en la región.
El primero corresponde a un asentamiento chané, se inicia 1.500 años a. n. e[20]., y termina el siglo IX d. n. e. El segundo, corresponde a la presencia chiriguana en la región, se extiende hasta aproximadamente el 1.440 d. n. e. momento en el que aparece el periodo incaico hasta la aparición de los españoles, aproximadamente el 1525 d. n. e. Posteriormente esta el asentamiento español.
Resultados que nos están indicando que las migraciones guaranís hacia los contrafuertes chané se iniciaron el siglo IX d. n. e., momento en que se produjo la gran sequía que asoló el continente y obligó a una revolución social, a la que por su importancia hemos identificado como el origen de la “Cultura Chané”[21], la que más abajo se resume.
Gandía en su estracto de las migraciones guaranís indica que “las migraciones a través del Chaco continuaron en forma ininterrumpida, pero sin el carácter guerrero de los grandes asaltos”. Reproduce testimonios, entre otros, de Gaboto y del cura Martín González, quien informa:”Aquy ay muchos indios que han ydo y venido dos y tres vezes allá con sus hijos y mugeres…”. También entrega testimonios de las migraciones que se realizaron por el norte argentino: Salta, Jujuy, Tucumán, Santiago del Estero y alrededores.
El contenido sagrado de Kandire constituyó el impulso subjetivo de este constante empeño migratorio de los guaraníes en busca de la Tierra sin Mal, pero la situación objetiva fue el estado de miseria en que se encontraron sus pueblos después de la “sequía extraordinaria del siglo IX”[22] que asoló el continente, momento en el que se inicia este proceso en el mundo guaraní.
Resulta paradigmática de estas motivaciones la extraordinaria y admirable migración que realizó el grupo Tupinamba[23], etnia tupí-guaraní que partió de Pernambuco, en el extremo oriental del Brasil, el 1539, en busca de Kandire y 10 años después, el 1549, llegó a la Ciudad de Moyobamba, situada en la ceja de selva al Oeste de la Amazonía peruana, en el actual Departamento de San Martín, a 6.000 km de su origen, donde se asentaron, supuestamente el lugar de la buscada Tierra sin Mal.
Sin embargo, en las primeras migraciones masivas que se produjeron a los territorios de la estirpe chiriguana, aparece una tercera fuerza motivacional y ésta fue la solidaridad con sus parientes chiriguanos, que eran invadidos por los ejércitos del imperio incaico; concretamente del Inca Yupanky y del Inca Waina Kapak.
Las migraciones masivas que se realizaron acompañando a Irala y Ñuflo de Chaves estuvieron fuertemente determinadas por las nuevas invasiones dirigidas por los conquistadores españoles de la corriente del norte, la que los guaraníes consideraron, al principio, como nuevos ataques de sus tradicionales enemigos de las montañas.
Ya se había fundado la ciudad de Chuquisaca en 1538, entre los cerros de Churuquella y Sicasica, los españoles se habían apoderado de las minas de Porco, establecieron otra ciudad en Chukiyawu, el 1549, Potosí se extendía vertiginosamente por los años del 1545. Llegaron las noticias de las matanzas de nativos del altiplano, como la masacre realizada ante la resistencia valiente que hizo el jefe Chaki Katari.
Cada vez eran más alarmantes las noticias de las incursiones españolas a los territorios del Chaco como la de Diego de Rojas, en 1538 y 1543, incursión que tuvo como único afán el saqueo. La invasión de Pedro de Anzures en 1542. La invasión de Juan Nuñez del Prado, 1549 a 1553, a los Juries, Diaguitas y Tucumán estableciendo poblaciones como El Barco I, II y III. Finalmente la invasión del Capitán Andrés Manso entre 1557 y 1564 son las razones por las que los guaraníes intensificaron sus migraciones hacia la Chiriguanía.
La alianza guaraní-española de las migraciones a los espacios ocupados por pueblos pertenecientes a la antigua lengua arawak, en los bordes de la cordillera andina consolidó la influencia guaraní en la forma de una nueva estirpe, conocida como chiriguana. Al mismo tiempo permitió a los españoles establecer importantes puntos de apoyo para una posterior ocupación efectiva de los extensos territorios de la llanura amazónica-platense.
Para los pueblos originarios del lugar: chané, chiquitos, mojos, etc., ambas corrientes tuvieron el carácter de invasoras de su territorio, sin embargo los primeros se integraron en el mestizaje chiriguano, dándole a este mestizaje una fuerza moral insospechada.
Los españoles se mezclaron con los aborígenes generando un mestizaje que se dividió en dos sectores uno hegemónico al servicio del centralismo, ya sea español o andino y el otro mayoritario, al que hemos identificado como los nativos o mestizos marginados.

CHIRIGUANÍA LIBRE
La formación de la nueva estirpe chiriguana en los territorios chané, invadidos por los guaraní, se realizó integrando complementariamente los elevados contenidos humanistas de la cultura chané con la valiosa cualidad guerrera guaraní, generando esta estirpe, tal vez única en el continente, por su cualidad expresada en la lucha intransigente en defensa de su libertad frente al avasallamiento de los ejércitos incas durante la segunda mitad del siglo XV y primer tercio del siglo XVI, posteriormente contra la invasión de los ejércitos del imperio español, hasta las guerras por la independencia y luego continuaron contra el abuso de la república hasta finales del siglo IXX, logrando mantener su territorio, la Chiriguanía, libre por cerca de cuatro siglos, hasta la masacre de Kuruyuki el 1892.
En las luchas de los pueblos nativos, sean chiriguanos, chané, chiquitanos, guarayos, mojeños, sirionós, yuracarés, yanahiguas, etc., es donde están las raíces profundas de la defensa de los intereses de los actuales departamentos de Santa Cruz, Beni, Pando Tarija y parte de Chuquisaca, Cochabamba y La Paz, herederos del antiguo Kandire.
La falta de encuentro fraterno entre estos pueblos heroicos y los mestizos de la llanura ha hecho que hasta ahora el colonialismo andino, imponga su hegemonía.
El mestizaje con el español dio como resultado por un lado al llanero campesino y obrero, apoyado en su trabajo, de carácter reposado, sencillo, alegre y generoso; por el otro lado, el sector hegemónico, asociado con el centralismo, en el que dominan las cualidades de arrogancia, de carácter impulsivo y agresivo.

Ocupación de Kandire
La alianza guaraní-española se mantuvo hasta el último viaje de Chaves de Asunción a Santa Cruz en el 1564. El asentamiento de poblaciones españolas en territorios llaneros como Nueva Asunción y Santa Cruz fundadas por Ñuflo de Chaves y La Barranca y Santo Domingo fundadas por Andrés Manso, convencieron a los chiriguanos de los propósitos de conquista, de saqueo y de sometimiento que traían los españoles a sus tierras, provocando la gran subversión que abarcó todos los valles el oriente andino y la llanura amazónico platense, incluyendo territorios del actual norte argentino.
Se destruyó Nueva Asunción, en la que murieron los soldados que la protegían, La Barranca, en la que se ejecutó el Cap. Cabrera y sus soldados, Santo Domingo, en la que se ejecutó al Cap. Manso y todos sus soldados y varios pueblos del sur como ser Nieva, Cañete y otras. El sucesor de Manso en la Gobernación de los Llanos, Pedro de Castro, también fue muerto con sus soldados al pretender ingresar a la Cordillera.
Esta fue la situación que encontró Ñuflo de Chaves a su regreso de Asunción a Santa Cruz. Ñuflo de Chaves a pesar de su alianza con los guaranís inició una campaña de represión y castigo de los sublevados entre el 1565 y 1568.
En reiteradas oportunidades los soldados de Chaves fueron atacados por los chiriguanos. Sufrieron bajas significativas. Finalmente en Mitimi, comunidad de los guaranís que Chaves había dejado a 30 leguas de Santa Cruz como una reserva frente a posibles sublevaciones de los chiquitos, los itatines también se habían sublevado y allí dieron muerte a Ñuflo de Chaves como justo castigo por haberlos traicionado al aliarse con sus enemigos de la montaña. A pesar de haberle servido incondicionalmente por más de dos décadas y por haberle causado tantos muertos a sus hermanos en las acciones represivas, que el cura Guevara llamo “las crueldades de Chávez”. Enrique Finot[24] registra el comentario que hizo el ex gobernador de Vergara en su Relación, refiriéndose al ajusticiamiento de Chaves, que “Por sus pecados lo habrían muerto los indios”.

GOBERNACIÓN DE MOJOS
Mapa de la época de la independencia. La frontera oriental
de Mojos se extendía hasta la Linea de Tordesillas
La creación de la gobernación de Mojos el 1560 fue de extraordinaria importancia para la geopolítica del virreinato de Lima. En primer lugar se generaron las condiciones para tomar posesión de los territorios que le correspondían a la corona española según el tratado de Tordesillas, en segundo lugar la superficie del virreinato se amplió en una proporción mayor al doble de la del virreinato. Por esta razón se buscó una ubicación para Santa Cruz bien tierra adentro que permita desde allí ocupar el territorio.
También influyó en esta decisión el recuerdo fresco del castigo dispuesto por Chaves en su primer viaje a Lima en el lugar que hasta hace pocos años fue conocido como “Las Horca de Chaves”, en el Km 15 del camino de Santa Cruz a Cochabamba, antes de La Guardia, donde hizo colgar en los árboles a los pobladores de una comunidad chané como castigo por su renuencia a sus exigencias. Con este antecedente y con la elevada densidad de los chanés, 400.000 habitantes[25], al oeste del Guapay el espacio no ofrecía seguridad para la nueva población española.
En tercer lugar se establecía un camino para acceder al Mar del Norte. En cuarto lugar se conectaba a través de Santa Cruz, el virreinato con Asunción, y en quinto lugar se establecía un límite a la frontera de la Gobernación del Paraguay.
La importancia de la nueva gobernación de Mojos, que le reconoció el virreinato de Lima, se expresa en tres hechos sobresalientes en esa época. En primer lugar obligó a la corona a apresurar el nombramiento del Presidente y los Oidores de la Audiencia de Charcas para cubrir con sus actividades las necesidades de este extenso territorio, realizado mediante Cédula de setiembre de 1561. En segundo lugar, mediante Cédula Real de agosto de 1563 amplió los límites de la Audiencia hasta la gobernación del Paraguay y en tercer lugar, acorde con la jerarquía que el Marqués de Cañete I le reconocía, nombró para gobernador de la Gobernación de Mojos a su hijo Don García Hurtado de Mendoza y Manrique, quién posteriormente fue, al igual que su padre, virrey de Lima, conocido como Cañete II.
Santa Cruz de la Sierra fue la capital de la gobernación de Mojos, en ella se estableció Ñuflo de Chaves en condición de Teniente Gobernador, con 90 soldados transformados en Señores Encomenderos.
Es lo que los españolistas de Santa Cruz identifican como los primeros cruceños, los fundadores del cruceñismo. La verdad es que estos noventa encomenderos no realizaron ningún trabajo por su mano, por cuestiones de honor no lo podían hacer, así lo establecía la tradición española.
En el listado de las comunidades repartidas entre 80 encomiendas, que nos proporciona Eric Red Taremacua[26] se suman 363 comunidades. Si estimamos 300 personas como mínimo en cada comunidad estamos hablando de más de 100.000 personas encargadas de la producción agrícola para el auto abastecimiento alimentario y el de Potosí, la construcción de las casas, su mantenimiento, labores domésticas, el abastecimiento de tejidos y otros productos para el aprovisionamiento del altiplano, y lo más importante, incluyendo las mujeres para los noventa españoles.
Este fue el sustento productivo y la mitad del aporte genético con el que nació Santa Cruz, el que determinó el modo de ser del cruceño, así como su dejo al hablar, entendiendo como cruceño a todo habitante nacido en el departamento de Santa Cruz.
Estos fueron los cruceños que no debemos olvidar, la gente de trabajo de este departamento, cuya descendencia se debe incorporar al proceso político, económico y social para que todos unidos enfrentemos la difícil lucha en defensa de nuestros intereses.
La fundación de Santa Cruz de la Sierra, el 26 de febrero de 1561, representa la consolidación temporal de la corriente conquistadora, caracterizada por poseer privilegios extraordinarios, pues en medio de la selva ellos eran dueños absolutos de vidas y haciendas.
Ya desde Asunción se había iniciado el lucrativo negocio de venta de nativos en calidad de esclavos, negocio que llegó a establecer en Santa Cruz una casa de comercialización humana y otra en Potosí. No pagaban impuestos, la única obligación que tenían era pagar las regalías al rey de las riquezas recolectadas, como no encontraron riquezas no entregaron regalías.
Una Cédula real de 1532, por la imposibilidad del rey de atender las necesidades de los conquistadores de Asunción, reconoció a éstos el derecho a elegir a sus autoridades, procedimiento que se utilizó para nombrar al sucesor de Chaves.
Los distintos adelantados de la corriente del sur, que ingresaron en plan de conquista, si bien es cierto que venían en busca de riquezas, también traían el compromiso de tomar posesión efectiva de los territorios que le correspondían a España de acuerdo con el tratado de Tordesillas, sin embargo ninguno cumplió este Segundo objetivo y todos se ocuparon exclusivamente de buscar las ansiadas riquezas, dando lugar a la expansión portuguesa.
La nueva administración de la corona, al mando del virrey Toledo, consideró intolerable la libertad con que se manejaban los encomenderos de Santa Cruz, inicialmente intentó poner control, pero los esfuerzos padecidos por los conquistadores durante la invasión le daban los argumentos suficientes para oponerse a todo intento de desconocimiento de sus prerrogativas.
Ante esta situación, finalmente el virrey optó por dejar abandonada a su suerte, en medio de la selva, a Santa Cruz de la Sierra, y fundar una nueva población española que la reemplace, obediente a su autoridad.
De esta manera nació San Lorenzo el Real de la Frontera con propósitos muy distintos a los que tenía Santa Cruz de la Sierra.
El apellido de El Real de la Frontera indica que su objetivo es el de pueblo de frontera, encargado de proteger tanto a Charcas como a Potosí de posibles amenazas de los nativos.
A la gobernación de Mojos se cambio el nombre con el de Santa Cruz con la intención de que termine con la actividad exploradora y se encargue de la seguridad de los andinos.
San Lorenzo representa el centralismo por excelencia, dispuesto por la corona, y al mismo tiempo, representa la pérdida de la importancia que dio Cañete a Santa Cruz de la Sierra, al desconocer las responsabilidades que se le asignaron originalmente.
Con estas nuevas funciones, posteriormente, el 1621, se obliga a fundirse Santa Cruz con San Lorenzo, sometiéndose ambas al centralismo, transformadas en una aldea abandonada a su aislamiento. A partir de este momento, hasta las luchas por la independencia, Santa Cruz y San Lorenzo, desempeñan el humillante papel de capataces esclavistas, al servicio del poder colonial.
Las muertes de Cabrera, Andrés Manso, Pedro de Castro y Ñuflo de Chaves en manos de la federación nativa de Chané, Chiriguania, Chiquitos, Guaraníes y Calchaquies obligó al virrey Toledo a dirigir personalmente la guerra, el 1574, que declaró contra los nativos de Kandire, aprovechando la situación para someter a la condición de esclavo a todo nativo capturado en los llanos.
De esta manera se estableció el coto más grande de cacería humana que ha existido en nuestro continente a fin de sostener la mano de obra que requería el laboreo minero de las riquezas argentíferas del Cerro Rico de Potosí y para las haciendas de valles y altiplano que lo alimentaban y vestían, y como ya se dijo, para ello se establecieron casas de comercio esclavo en Potosí y Santa Cruz.
La guerra defensiva contra Toledo fue todo un éxito para los nativos, Toledo debió salir escapando y enfermo. Posteriormente, luego de un periodo de 10 años de exclusiva iniciativa chiriguana, los españoles organizaron otro asalto coordinando entre las fuerzas de Santa Cruz, Potosí y Tarija, en la que se destaca la agresividad del capitán Lorenzo Suárez de Figueroa.
A pesar de no poder mantener su presencia en el territorio de la Chiriguanía, logró diezmar a las fuerzas chané de los valerosos Vitapué, Tendy y Goli Goli generando condiciones para fundar San Lorenzo el Real de la Frontera a orillas del rio Guapay.
Posteriormente, asegurado el control de los chanés, se traslada a la Punta de San Bartolomé, lugar donde también se incorpora la población de Santa Cruz y cuyo nombre es el que finalmente se impone por la conveniencia de usarlo para poder beneficiarse de los privilegios que ésta tenía.
Por el lado del frente de Tarija las fuerzas de Luís de Fuentes atacan varias comunidades chiriguanas, en una de ellas, la comunidad de Chiquiaca, muere el jefe Barachavi. En un diálogo concertado para establecer la paz fueron asesinados traidoramente los jefes Maricurey, Tolaba, Komariva, Tarive, Yangua, Pocherena Guamais, Tapeyve y Taparandu. Si bien se hizo mucho daño a los chiriguanos las fuerzas españolas debieron abandonar el campo.
Los chiriguanos entraron a un periodo de cierta tranquilidad, con lo que se entró a un ciclo de recuperación demográfica y económica de los nativos. Los españoles consolidaron la frontera, logrando penetrar la zona de Vallegrande.
Ante el fracaso del ejército en su empeño por establecer bases permanentes dentro de la Chiriguanía se recurrió a una estrategia de la penetración espiritual, mediante las misiones jesuíticas, domínicas y franciscanas, entre otras.
Luego del control espiritual de las comunidades, penetraba la invasión civil con el comercio y haciendas y finalmente se consolidaba la penetración militar y la consecuente servidumbre.
Fue un largo proceso con cientos y miles de héroes que ofrendaron sus vidas defendiendo el modo de ser nativo. Fueron los verdaderos defensores de los intereses locales y regionales, al final después de tres siglos y medio, la Chiuriguanía libre fue temporalmente derrotada en la batalla de Kuruyuky, de 1892, en la espera de lograr algún día la unidad de todas las fuerzas cruceñas para poder enfrentar al poder neocolonial del centralismo andino.
Fue durante la guerra independentista que empieza a surgir en la población urbana un sector identificado con los intereses nativos. Sanabria H. nos informa que “El primer movimiento de insurrección habido en esta ciudad fue tramado por un grupo de negros y mulatos que tenían apartada residencia en el lugar de extramuros hasta hoy conocido con el nombre de Tao”[27], el que fue abortado el 15 de agosto de 1809.
Un año después, el 10 de setiembre de 1810, se produce con éxito la primera sublevación libertaria en Santa Cruz al mando del Cnel. Antonio Suárez con sus 300 hombres en el fuerte de Membiray, gracias al apoyo que le brindó el Jefe Chiriguano Barinday[28] con más de 1.200 nativos de las comunidades aledañas del territorio libre de la Chiriguanía.
Es con este respaldo que el Cnel. Suárez consigue la destitución del gobernador de Santa Cruz Pedro José Toledo Pimentel y luego en Cabildo abierto se constituye la Junta gubernamental, el 24 de setiembre de 1810, conformada por el Cnel. Antonio Suárez, el sacerdote José Salvatierra y el Dr. Seoane.
El abandono de los valerosos chiriguanos genera condiciones para la rearticulación realista. Luego de un corto periodo realista vuele a hacerse cargo de la comandancia el Cnel. Suárez, el que finalmente entrega la gobernación al Cnel. Ignacio Warnes, en 1813, enviado del general Belgrano, jefe del ejército expedicionario de la Provincias Unidas del Rio de la Plata.
Hay que destacar que el General Belgrano recibió un refuerzo importante de 2.000 kereimbas[29] para su ejército, proporcionados por el general Kumbay, jefe chiriguano de Cordillera, también colaboró con Padilla y Azurduy.
En la batalla de trascendencia continental de la Florida, dirigida por Warnes y Arenales, tuvo una importante participación los kereimbas comandados por el Mburuvichaguazu Guariyu. Posteriormente, luego de cruentas batallas es retomada la plaza por los realistas, situación que se mantuvo hasta la independencia de 1825, fecha de creación de la república centralista que conocemos, sustento del neocolonialismo andino que oprime a los pueblos de la llanura.
La dirigencia cruceña se adhirió al centralismo andino desde la fundación de la república. Poco a poco fue creciendo la conciencia regional expresada con algunos intentos de rebelión frustrados de sectores minoritarios en la ciudad.
Es recién en el siglo IXX que la conciencia regional va ganando a la dirigencia cruceña, expresada en los últimos años en las luchas por las regalías petroleras, la autonomía municipal y finalmente la democracia y la autonomía departamental.
A pesar del amplio respaldo logrado no alcanza la victoria deseada, precisamente por no integrar activamente a los nativos urbanos con los nativos del campo, como lo hizo Antonio Suárez en Membiray, el 10 de setiembre de 1810. Todavía olvida que El Libertador Grigotá, nativo de Kandire, fue el primer defensor de los intereses de nuestros pueblos y construyó las bases de la primera federación de pueblos libres de Los Llanos y del Kollasuyo y también olvida la lucha de tres siglos y medio sostenida por los pueblos del sur en defensa de nuestro territorio, bases de contenido humano, sobre las que se debe reconstruir la unidad de lo que hoy se llama Bolivia.
Cultura Chané
El 1956, Kenneth Lee descubrió las estructuras precolombinas de los Llanos de Mojos. Estructuras que eran conocidas y utilizadas parcialmente por los lugareños y se las conocía como Gran Mojos, también Gran Paitití.
Allí, en una superficie de inundación a lo largo de seis meses del año, de más de100.000 km2, los Arawak desarrollaron una avanzada civilización hidráulica asentada en la limnocultura, esto es la producción a partir de la fertilidad del agua.
El Gran Mojos estaba conformado por una población asentada en un promedio de 20.000 lomas[30], las que hacen una población probable de 2 millones de habitantes.
Con un detallado conocimiento del ecosistema desarrollaron complejos productivos hidráulicos aún hoy no recuperados. Construyeron un conjunto de lagunas artificiales que les permitía el aprovisionamiento sostenido de carne de pescado. Un amplio conjunto de camellones les permitía el cultivo a pesar de las inundaciones, con el aditamento de una fertilización con la que triplicaban la producción.
Habían desarrollado una compleja red hídrica[31] de canales artificiales, que permitía navegar de este a oeste por todo el territorio acortando notablemente las distancias. Algunos al borde de terraplenes para permitir la corriente hídrica y la navegación en épocas bajas del agua. Un sistema de terraplenes, en total de más de 1.500 km de longitud permitía en algunos casos el transporte a pie, pero servían más que todo para dirigir las aguas. El conocimiento que sustentaba este sistema se ha perdido y es fruto de nuevas investigaciones.
En el siglo IX d.n.e. hubo un fenómeno extraordinario, del que todavía no se ha precisado su origen. Tal vez la erupción excepcional de un volcán, la colisión con un meteorito o el fenómeno del niño, con características nunca más repetidas.
Lo concreto es que como resultado de este fenómeno se produjo una sequía en el continente de efectos catastróficos. En Santa Cruz tuvo un comportamiento cíclico, con periodos que variaron entre 7 y hasta algo más de 30 años. Con una duración total de 280 años, Comprobado con las investigaciones realizadas por el autor sobre las Lomas de Arena de El Palmar[32].
Las huellas dejadas por las lomas nos indican que las éstas se originaron en las playas del río Piray, evidentemente como resultado de una sequía extraordinaria que secó el río. La distancia y la velocidad de desplazamiento indican que nacieron en el siglo IX y dio lugar a las lomas de arena, que se encuentran, ahora, pasando lentamente por El Palmar.
Esta sequía ha sido detalladamente comprobada, como causante de la descomposición de la civilización Maya en el siglo IX por equipos de investigadores de universidades de Miami, Princeton de Estados Unidos, del Instituto de Ciencias de la Tierra en Zurich (Suiza)[33] y el Instituto Oceanográfico Woods Hole, en Massachusetts.
En América del sur, en Gran Mojos y en Tiwanaku, y en centro América, en la civilización Maya se produjo una estrechez generalizada por la carencia de alimentos y de recursos naturales provocando un estado de convulsión entre las dirigencias privilegiadas, los sectores burocráticos, militares y religiosos, cuya existencia fue negada por la ausencia de los excedentes que los sostengan. Ellos, en su desesperación, desencadenaron todo tipo de violencias para intentar sobrevivir, con diferentes desenlaces determinados por las condiciones del lugar, en todo caso en la civilización de Gran Mojo, en la rama chané, transformados posteriormente en chiquitanos, chiriguanos y otros, los sectores del trabajo se desplazaron al campo en busca de la sobrevivencia, luchando para conseguir el sustento, desembocaron en una sociedad de trabajo comunitario, asentada en el respeto a la vida para asegurar la colaboración indispensable en la búsqueda de una mayor eficiencia en la producción de los alimentos, se valoró la no violencia, el dialogo como forma de solucionar los problemas y el respeto al otro, se aprendió a apreciar la solidaridad y la vida sencilla, se reinventó la reciprocidad, se revalorizó el amor y la búsqueda de la felicidad en nuestro modo de ser (el Ñandereko guaraní) conformando con el tiempo lo que los guaranís denominaron Kandire, la tierra sin mal, la tierra de gente buena, la tierra de la abundancia, la tierra de la felicidad y el amor. Estas relaciones eran las que encontraron los españoles entre los pueblos chané, chiquitanos, chiriguanos, mojeños, etc., la organización social y económica que desarrollaron los pueblos de la selva que todavía sobreviven, es cierto, con muchas deformaciones introducidas por el feudalismo español y el centralismo andino, son las expresadas en la propuesta de la Asamblea del Pueblo Guaraní a la Asamblea Constituyente[34], resumen de su herencia de la antigua Cultura Chané, patrimonio cultural de Kandire, (Ver Kandire de Jordán), también expresadas en “El nuevo pacto con el estado boliviano” propuesto por la Nación Camba[35], también conocidos como Media Luna o Nación de la Llanura.
La Cultura Chané estaba asentada en una avanzada relación democrática, superior a la democracia griega, los problemas los conversaban en la comunidad, donde todos tenían derecho a participar y no se levantaban hasta llegar a acuerdos satisfactorios para todos, no había resoluciones por mayoría.
A diferencia de los griegos no tenían esclavos para que les hagan el trabajo mientras ellos ejercían la democracia, debían trabajar todos.
El jefe no tenía ninguna autoridad coercitiva, en realidad era un coordinador, al que respetaban mientras ejercía la función que se le había encomendado, fuera de ella era un miembro más de la comunidad.
El poder surgía de abajo hacia arriba y los coordinadores preservaban sus funciones mientras tengan el reconocimiento de sus mandantes.
Era una sociedad principista, pacífica y trabajadora, en resumen era una sociedad humanista.
El aporte de la Cultura Chané al pensamiento humanista es el legado socio cultural más importante que hacen los nativos de la selva, ya se llamen de Kandire, Nación Camba, Media Luna o Nación de la Llanura, a la humanidad.
Las nuevas relaciones de producción de la naciente sociedad humanista ya han empezado a competir con las viejas relaciones de producción de la agonizante era de la civilización.
El excedente, sostén de todos los sistemas productivos de la era de la civilización, escasea cada vez más y exige nuevas relaciones de producción, razón por la que las crisis del sistema se hacen cada vez más profundas. La crisis desatada este año 2008, está mostrando la incapacidad del sistema para enfrentar los complicadísimos problemas de la humanidad toda y se está viendo obligada a aceptar la disgregación de la unipolaridad del poder a nivel mundial a favor de una multipolaridad del poder. Ver planteamientos del grupo de los 20, poder que con nuevas crisis se continuará desmontando en beneficio de una democracia de bases, ya hay propuestas para que el problema sea bajado al nivel de las Naciones Unidas.
A consecuencias de la bipolaridad surgida de la guerra de los 40, nació Comunidad Europea y se consolidó como la Unión Europea en base de un peculiar estado federal plurinacional, en permanente perfeccionamiento. Del Consejo de Primeros Ministros se asigna el Presidente en forma rotatoria cada seis meses, es decir que todos los estados componentes de la unión participan del privilegio de ejercer la presidencia.
Los problemas importantes, por ejemplo, los que tienen que hacer con las política de estado, la modificación de los tratados o la aceptación de nuevos socios, se resuelven sólo por unanimidad, los problemas menores son resueltos en los consejos de ministros.
El Consejo de Ministro es flexible y lo conforman los ministro del área donde surgen los problemas para resolver.
Suiza es otro ejemplo, mucho más antiguo, de un estado federal plurinacional y pacifista, no tiene ejército y no participa de ninguna coalición militar, sin embargo es el país con uno de los mejores niveles de vida de Europa.
También tiene un consejo ejecutivo superior, donde se rotan sus miembros cada año para ejercer la presidencia.
Por otro lado la crisis lanza cada vez mayor cantidad de empresas a la inviabilidad económica por falta de utilidades, haciendo perder interés a su propietarios, lo que abre las posibilidades para que los trabajadores se hagan cargo de ellas a condición de garantizar los salarios, es el caso de las cooperativas mineras en Bolivia y de empresas en quiebra económica en Argentina.
Ya se encuentra establecida la más avanzada organización administrativa de las empresas más eficientes del orbe, asentadas en una estructura de redes y la microelectrónica, la que será evidentemente el modelo que coordinará las actividades de las unidades federativas del mundo humanista y sin fronteras.
Las lineras principales, orientadoras de las estrategias a seguir para alcanzar con los menores esfuerzos el humanismo superior las podemos resumir como sigue:
1 El agotamiento de los recursos naturales
2 El debilitamiento del poder vertical
3 El nacimiento del estado administrador
4 La generación del poder desde las bases
5 El ejercicio de la democracia directa
6 La cultura de paz como alternativa a la cultura del poder
7 Reforzamiento de las relaciones de reciprocidad[36]
Su anuncio es una brisa refrescante que llena de Esperanzas ciertas al espíritu del ser humano abrumado por las terribles amenazas de terror apocalíptico con que se anticipan los estremecimientos de muerte de la vieja sociedad, que se resiste a desaparecer.
Debemos estar alborozados porque la calidad humana del ser lentamente se está imponiendo, y está surgiendo victoriosa la democracia humanista en reemplazo de las despreciables relaciones establecidas por el poder de la vieja civilización.
Con este horizonte es que no se puede concluir la presentación sin indicar que el futuro de esta región se encuentra en la conformación de la Federación Humanista que contemple en la coyuntura inmediata lo que sigue:
1 La preservación de la unidad nacional y departamental.
2 Constituir una federación de nueve estados
3 Reconocimiento de autonomías nativas y municipales a nivel departamental con participación en el Consejo Ejecutivo Departamental
4 Constitución de un órgano ejecutivo nacional con un representante por estado.
5. La presidencia debe ser rotatoria y sin capacidad de decisión.
6 Conformacion de regiones departamentales y municipales o nativas.
Santa Cruz, 11 de marzo de 2008


[1] George, Susan. Informe Lugano. Madrid. Icaria/Intermó. 2001
[2] Damián Vaca, El himno que no cantamos, El Deber-Brújula 15/feb./2003
[3] Álvaro Jordán, Kandire, origen y evolución del llano boliviano, Editorial Universitaria de la UAGRM, Santa Cruz, Bolivia, 2005.
[4] Calificativo utilizado para identificar a los originarios y a los habitantes comprometidos con la defensa de los intereses regionales.
[5] Isaac Sandoval Rodriguez, Nación y Estado en Bolivia, Editorial Mundy Color S.R.L. La Paz, Bolivia, 1995.
[6] Cadogan, Leon. Tradiciones Guaranies en el Folklore Paraguayo. Edición de BArtolomeu Meliá. Fundación “León Cadogan” y Centro de Estudios Paraguayos “Antonio Guasch”. Asunción 2003.
[7] http://es.wikipedia.org/wiki/Alejandro_VI
[8] http://es.wikipedia.org/wiki/Bulas_Alejandrinas
[9] Las negritas son nuestras
[10] Jordán Álvaro, Kandire. Origen y evolución del llano boliviano, Imp. Univ. UAGRM. Santa Cruz. 2005
[11] Suárez de Figueroa deriva de “chiriones”, que significa mestizo, hijo de guaraní en mujer de otra estirpe. Nota 12 de Sanabria H. en Relación Cierta de Alcaya, UAGRM, SC, 1961
[12] Enrique Gandía, Historia de Santa Cruz de la Sierra, una nueva república en Sud América. Bs. As. 1935
[13] Sanabria, H. Cronistas Cruceños del Alto Perú virreinal, UAGRM, Santa Cruz, 1961
[14] Grigotá: Titulo jerárquico equivalente a Presidente o Rey
[15] Jordán Álvaro, Kandire Federal es la Tierra sin Mal. Soc. de Est. Geog. e Hist. SC. Bol. Nº 61, 2008
[16] Ver sociedad chané en “Kandire” de Álvaro Jordán, p. 41 y adelante.
[17] Según Sanabria, en Cronistas Cruceños, Nota 1; Significa “lo que fue de Grigotá”
[18] Ruy Díaz de Guzmán, Historia Argentina, 1612
[19] Pinkert, G. Historia de Santa Cruz, T. 1, Santa Cruz, 1990
[20] a. n. e. Antes de nuestra era; d. n. e. Después de nuestra era
[21] Ver Kandire de Jordán A.
[22] Ver Kandire de Jordán A. UAGRM SC, 2005
[23] Ochoa, J.C., El Mito de la Tierra sin Mal en los Tupí-Cocamas, Barcelona 2002
[24] Finot E. Historia de la conquista del oriente boliviano, Edit. Juventud, La Paz, 1978
[25] Pifarrè, F. Historia de un pueblo, CIPCA 31, La Paz 1989
[26] Eric Red Taremacua, Los Grandes Errores del Conquistador, Santa Cruz. 2005
[27] Breve Historia de Santa Cruz de Sanabria H., Edit. Juventud, La Paz, 1973
[28] Independencia de Santa Cruz, de Nino Gandarilla. CEN, Santa Cruz, 2008
[29] Kereimbas en guaraní significa guerreros
[30] Erickson, C. Lomas de Occupación en los Llanos de Moxos, Montevideo, 1996
[31] Barba, Josep. Moxos: una Limnocultura, CEAM Barcelona, 2003
[32] Jordán , A., Kandire Origen y evolución del llano boliviano, p 48, UAGRM SC, 2005
[33]Jorge A.Bañales, http://terraeantiqvae.blogia.com/2004/120402-la-caida-del-imperio-maya.php
[34] Asamblea del Pueblo Guaraní, “Ore ñemongeta”, Propuesta hacia la Asamblea Constituyente, Chaco boliviano, 2006.
[35] Propuesta autonomista de Nación Camba. http://www.nacioncamba.net/documentos/nuevopacto.htm
[36] Dominique Temple y Mireille Chabal, Teoría de la reciprocidad: T I, La reciprocidad y el nacimiento de los valores humanos. T II, La economía de la reciprocidad. T III, El frente de civilización. Editorial “Garza Azul”. La Paz, Bolivia. 2003

2 comentarios:

ahmed dijo...

Que excelente trabajo, es una viaje a la historia del Oriente cordillerano con una visión humanista muye buena!
En Hora buena que se está rescatando la historia de la civilización hidráulica del Beni, Sana Cruz y alrededores. Cuando hice los atlas de Bolivia hace 18 años, lo que lamenté fue no haber podido estudiar a fondo en invierno y verano el sistema productivo de canales y terrazas antiguo del oriente Boliviano. Hoy que estamos descubriendo, restos de antiguas ciudades a todo lo largo del flanco oriental de los andes, fijamos en la mirada en esa gran región de Kandire que nos ilustra soberbiamente el Sr Jordán. Dios Guarde Ud !
Ahmedrestrepo@gmail.com

ahmed dijo...

Que excelente trabajo, es una viaje a la historia del Oriente cordillerano con una visión humanista muye buena!
En Hora buena que se está rescatando la historia de la civilización hidráulica del Beni, Sana Cruz y alrededores. Cuando hice los atlas de Bolivia hace 18 años, lo que lamenté fue no haber podido estudiar a fondo en invierno y verano el sistema productivo de canales y terrazas antiguo del oriente Boliviano. Hoy que estamos descubriendo, restos de antiguas ciudades a todo lo largo del flanco oriental de los andes, fijamos en la mirada en esa gran región de Kandire que nos ilustra soberbiamente el Sr Jordán. Dios Guarde Ud !
Ahmedrestrepo@gmail.com